La mermelada de tomate no es muy común aquí en Costa Rica, pero te garantizo que es deliciosa. La puedes comer sola o en pan tostado con queso crema, con queso ricotta, con pancakes, con queso fresco como aperitivo, en fin; con cualquier cosa donde uses mermelada normal. Y ésta particularmente al ser casera es mucho más saludable que la mermelada que consigues en el supermercado llena de aditivos y preservantes.
¡Combina con todo, es fácil de hacer y solo necesitas 3 ingredientes!
Mermelada de tomate
Estos tomatitos fueron un regalo y estoy realmente feliz y agradecida de haberlos recibido. Son tan dulces y bonitos que lo primero que se me ocurrió fue hacer mermelada. Nunca había hecho de tomate así que me puse manos a la obra aprovechando que tenía más de 4 kilos en mi casa.
Para esta receta utilicé un kilo y medio de tomates que se redujeron a 700 gramos de pulpa. Endulzado con azúcar normal, pero perfectamente se puede usar algún sustituto. La cantidad de azúcar es la mitad del peso de los tomates cuando los tengamos pelados y sin semillas.
¡La mermelada está llena de fibra, hierro, antioxidantes y mucho sabor!
Se mantiene en refrigeración durante una semana, en un frasco de vidrio esterilizado con tapa.
Esta receta funciona muy bien con cualquier tipo de tomate siempre y cuando estén bien maduros.
Algo que aprendí haciendo esta receta es que para pelar los tomates primero se deben escaldar. Pero antes de explicar este procedimiento tengo que decir que me encanta poder experimentar y hacer varias pruebas con mis recetas para poder pasarte todos los trucos y consejos para que no falles.
Escaldar es sumergir un alimento en agua hirviendo durante unos segundos. El objetivo de escaldar un alimento puede ser pelarlo con más facilidad, como en el caso de los tomates para hacer mermelada. Para escaldar los tomates, debes seguir estos sencillos pasos:
- En primer lugar, se llena una olla con agua y se lleva a ebullición (100 ºC).
- Se sumergen los tomates durante un minuto, dependiendo de la cantidad y tamaño se dejan más tiempo. Los tomates que yo utilicé eran muy pequeños, pero si usas más grandes lo puedes dejar un minuto más.
- Inmediatamente después y para cortar la cocción, se introducen en agua muy fría. Se pueden incorporar unos cubitos de hielo para bajar aún más su temperatura.
- Seguidamente se procede a pelar y quitar las semillas.
La idea de pelar los tomates y quitarles las semillas es que la mermelada quede con una textura pareja. Si te gusta con semillas se las puedes dejar sin ningún problema, yo se las dejé y me encantó. Y se las dejé porque no tuve más remedio ya que se me pasó un poquito la cocción jajaja. Pero estoy feliz de poder darte este tip para que tengas cuidado y no te pase lo mismo.
El tercer ingrediente que lleva esta receta es jugo de limón, que es el responsable de que nuestra mermelada quede espesa. Este es otro secreto que quiero compartirte y que aprendí haciendo esta receta. El limón contiene pectina. La pectina reacciona con el azúcar haciendo que la mezcla solidifique.
Añadir jugo de limón hará que espese. Eso sí, hay que hacerlo sin pasarnos para no alterar el sabor de nuestra mermelada. La cantidad adecuada es 2 cucharadas soperas por kilo de fruta. En este caso, le puse 1 cucharada por la cantidad que usé. Pero te dejo el dato para que lo tomes como referencia.
Espero que estos consejos sean de utilidad y puedas hacer esta mermelada a la perfección, sin fallar.
Preparación
Para hacer la mermelada, primero pesas los tomates y los lavas bien, esa cantidad se va a reducir a la mitad. Pones a hervir agua en una olla grande y cuando esté hirviendo echas los tomates. Espera que vuelva a hervir y los dejas un minuto. Luego los sacas y los introduces en agua fría para cortar la cocción y poder pelarlos con facilidad. En la misma olla o en una más pequeña colocas los tomates, el azúcar y el jugo de limón. Pones la olla a calentar a fuego lento y lo dejas 40 minutos removiendo constantemente con cuchara de madera para que no se pegue. Recuerda que la cantidad de azúcar es la mitad de lo que pesan los tomates ya pelados.
Ahora puedes disfrutar de esta deliciosa mermelada.
Receta de la mermelada
INGREDIENTES
- 700 g de tomates pelados
- 350 g de azúcar
- 1 cucharada de jugo de limón
PREPARACIÓN PASO A PASO
- En primer lugar, se llena una olla con agua y se lleva a ebullición (100 ºC).
- Cuando el agua de la olla esté hirviendo echas los tomates dentro
- Espera que vuelva a hervir y los dejas un minuto
- Pela los tomates y, si lo prefieres, retírale las semillas.
- En la misma olla o en una más pequeña colocas los tomates picados o procesados, el azúcar y el jugo de limón.
- Pones la olla a calentar a fuego bajo y lo dejas 40 minutos removiendo constantemente para que no se pegue.
- Al enfriarse se espesa, por eso es mejor dejarla un poco líquida y no cocinarla demasiado.
- A disfrutar esta delicia con lo que más te guste.
¡Que disfrutes!